10 julio 2008

Como ven, todo llega.




El PNV y el PSE-EE estarían, de celebrarse ahora las elecciones al Parlamento vasco, en un "empate técnico virtual a escaños" y la actual coalición tripartita de gobierno (PNV, EA y EB) "tendría casi imposible la posibilidad de formar gobierno e Ibarretxe muy difícil la obtención de la lehendakaritza".

Estas son algunas de las estimaciones electorales del Euskobarómetro hechas públicas hoy y realizadas a partir de 1.800 entrevistas personales y telefónicas llevadas a cabo entre el 2 y el 20 del pasado mayo.

Según este estudio, el PNV volvería sin embargo a ser el ganador electoral en unas hipotéticas elecciones autonómicas con un 34% de los votos válidos (algo menos de 400.000 sufragios y entre 24 y 27 escaños, frente a los 468.117 votos y 29 escaños que logró en 2005 la coalición PNV-EA).

El PSE-EE mejoraría notablemente sus resultados con un 32% de los votos (350.000 papeletas y entre 25 y 28 escaños, frente a los 18 de esta
legislatura) y "estaría en condiciones de volver a disputarle al PNV la primera posición, como en 1986".

Estas perspectivas electorales parten de la hipótesis de que el PNV y EA concurrirán por separado, que el partido que lidera Rosa Díez, UPyD, se presentará por primera vez y que la izquierda abertzale no podrá presentarse y volverá a promover la abstención.

En lo que al PNV se refiere, éste mantendría la primera posición en Vizcaya con entre diez y once escaños, mientras que en Guipúzcoa, con entre ocho y nueve escaños, el PSE-EE le podría disputar la primera posición, y en Álava lograría entre 6 ó 7 escaños.

El PSE-EE, que obtendría un "resultado histórico" y "podría erigirse en vencedor parlamentario", conseguiría sus mejores resultados en Álava, alcanzando por primera vez la primera posición con un 35% de los votos válidos y 9 ó 10 escaños.

En Vizcaya, el partido que dirige Patxi López acortaría distancias con el PNV con un 31% de los votos y entre 8 ó 9 escaños, mientras que en Guipúzcoa, con el mismo porcentaje y escaños que en el citado territorio, "le disputaría la primera posición al PNV".

El PP por su parte "retrocedería ligeramente" con alrededor de un 16% del voto válido (180.000 votos), aunque mantendría en todas las provincias la tercera posición y obtendría entre 13 y 15 parlamentarios, la misma cifra que en 2005.

Con estos resultados, la representación conjunta de PSE y PP alcanzaría, "por primera vez, la mayoría absoluta en el Parlamento vasco", según esta encuesta, que indica que "la alternancia es muy probable" con "posibilidades claras para el PSE-EE de formar gobierno con Patxi López como Lehendakari".

De hecho, la mayoría del electorado, un 51%, demanda un cambio de lehendakari, aunque Ibarretxe sigue contando con más apoyo explícito
(41%) que López (18%).

Sin embargo, la percepción mayoritaria (70%) de la ciudadanía es que el PNV volverá a ser ganador, aunque se muestra "mucho más dividida" en sus preferencias de triunfo entre el PNV (33%) y el PSE-EE (un 25%).

Respecto al resto de partidos, el Euskobarómetro indica que EB, con unos 50.000 votos y alrededor de un 4%, "vuelve a retroceder, manteniendo su peso parlamentario (sus tres escaños), aunque no su papel clave en la formación de la mayoría gubernamental".

EA, lograría con unos 50.000 votos (alrededor de un 4%), "su peor resultado en solitario", que le darían entre 2 y 4 diputados, mientras que Aralar, con unos 30.00 votos y alrededor de un 3% mantendría su actual escaño por Guipúzcoa.

La izquierda abertzale ilegalizada contaría, según esta estimación, con una intención directa de voto de alrededor del 6% o unos 100.00 electores, pero "todo apunta que se quedaría fuera del Parlamento y promovería, de nuevo, la abstención".

En lo que a UPyD se refiere, ésta formación conseguiría "algo más" de 10.000 votos y alrededor de un 1% y se quedaría sin representación parlamentaria.

El Euskobarómetro indica que aunque la proporción de la ciudadanía que se identifica con algún partido es minoritaria (39%), PNV y PSE-EE son los que más identificación (12%) y simpatía (11%) obtienen y empatan tanto en esto como en la predisposición de voto (17%).

Finalmente se estable que el 83% de los entrevistados dicen tener definidas ya sus preferencias y que sólo un 17% no expresa una intención clara, siendo los electorados "más dispersos y confusos los de Aralar, EB, EHAK y PNV-EA".